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David Belmar, el socio de Lozano, fracasó en la televisión chilena y ahora quiere manejar los derechos televisivos del fútbol peruano

El dueño de 1190 Sports tuvo un paso decepcionante por la televisión abierta en su país, Chile. Ahora ensaya extrañas fórmulas para intentar quedarse con los derechos de televisión de la liga peruana. Agustín Lozano, el investigado por corrupción, parece haber encontrado el socio “ideal”.

David Belmar y Agustín Lozano.
Umberto Jara
- 22 octubre 2022

David Belmar Torres es un administrador público graduado en la Universidad de Chile.  Tiene 57 años de edad, casado y tres hijos. Fue empleado estatal en la dirección de presupuestos del Ministerio de Hacienda chileno y luego trabajó en Televisión Nacional de Chile como director ejecutivo. En el año 2010 pasó al sector privado al ser contratado por Canal 13, cuyo dueño es el empresario Andrónico Luksic.

Es preciso recordar que Luksic, el empleador de Belmar Torres, es el poderoso empresario chileno que entre 1997 y 1999 construyó en Lima, sin respetar las normas, la fábrica de pastas Luchetti en plena reserva natural de Villa para aprovechar el agua del subsuelo que es la fuente que da vida a los pantanos de Villa.

Por su evidente ilegalidad la obra fue paralizada por el entonces alcalde de Lima, Alberto Andrade, y Andrónico Luksic recurrió al jefe del Servicio de Inteligencia, Vladimiro Montesinos, a fin de lograr, con acuerdos bajo la mesa, una sentencia favorable en el Poder Judicial. Con la caída del régimen fujimorista, se tuvo que ir del Perú.

Andrónico Luksic y Vladimiro Montesinos en la salita del SIN, hablando sobre el caso Lucchetti.

Bajo el mando del mencionado Andrónico Luksic, David Belmar —el actual presidente de 1190 Sports la empresa que promueve Agustín Lozano— se desempeñó como director de programación del canal 13 de Santiago de Chile. Quienes conocen a Belmar sostienen que es un cultor del bajo perfil, rasgo inculcado por Andrónico Luksic, quien durante años batalló, incluso judicialmente, para que no se exhibiera su vladivideo.

1190 Sports, la empresa de Belmar que ha encandilado a Agustín Lozano, pretende tener los derechos de televisión del fútbol peruano; entonces, cabe una pregunta de fondo: ¿es Belmar un hombre con talento televisivo? La respuesta es negativa porque fue responsable de uno de los más grandes fracasos de la televisión chilena: la cancelación del programa Bailando por un sueño que ocasionó una pérdida de casi $1.100 millones de pesos a Canal 13 y a la productora Lateral, esta última es una empresa de Belmar que gestionó la compra del formato y los derechos de exhibición que le pertenecían a Ideas del sur, la productora del argentino Marcelo Tinelli.

Según el portal Infobae, David Belmar, el socio de Lozano en el intento de apropiarse de los derechos de televisión del fútbol peruano, parece no tener una buena visión para el negocio televisivo por cuanto al adquirir los costosos derechos del `programa Bailando por un sueño no tomó en cuenta que, en esos momentos, año 2020, la televisión chilena atravesaba “una crisis financiera y de contenidos muy profunda, el público rechazó de plano la llegada del formato durante el verano, ya que lo consideraron muy ostentoso, en momentos en que la sociedad chilena vive conflictos que tienen que ver con lo económico y con la desigualdad de derechos, que luego de más de treinta años han estallado en las calles y son moneda corriente en Chile”.

Infobae anunciando el final de “Bailando por un sueño” en versión chilena.

Vista esa información, asoma un dato importante: Belmar carece de aptitudes para descifrar el contexto social y económico de un país. Entonces, si no pudo manejarse bien en su país, Chile, ¿cómo podría operar adecuadamente en un medio que le es ajeno como el Perú con todas las complejidades y dificultades que existen en el fútbol y en el país?

Una muestra de su desconocimiento de la realidad del fútbol peruano es que David Belmar en una entrevista concedida al suplemento deportivo del diario El Comercio, intenta explicar su proyecto para el Perú a partir de lo que ocurre ¡en la Premier League inglesa y en la liga española¡, de las cuales, alguien debería avisarle, está a años luz nuestro modesto torneo nacional. Tampoco parece saber que aquí juegan muchos dirigentes que son, básicamente, informales al igual que su socio, el presidente de la FPF.

Otro ámbito que se cuestiona a Belmar y que las autoridades sanitarias chilenas sancionaron, es su falta de empatía con los trabajadores. En efecto, en una situación tan grave como la pandemia Covid-19 en la que estaba en riesgo la vida de seres humanos, su empresa fue multada por un grave hecho.

Según información de los diarios La Tercera y La Nación “La Seremi de Salud Metropolitana inició un sumario al reality de baile y la autoridad sancionó a la productora Lateral (propiedad de Belmar), porque no se cumplieron los protocolos COVID-19, que buscan prevenir la propagación de la enfermedad entre sus trabajadores”.

En suma, la gestión como productor televisivo de David Belmar fue un fracaso económico y televisivo que el experto de El Observatorio de Medios FUCATEL, Luis Breull, resume de este modo: “Un fracaso que podía anticiparse. Se trataba de un programa muy caro, que obligaba a apostar por la fidelización constante de audiencias en una industria cada vez más fragmentada e infiel. Sin considerar el alto costo inicial por la contratación de todo el elenco de participantes, bailarines, jurados y producción. El tiro de gracia lo dio el sumario sanitario de la Seremi de Salud Metropolitana, la animadversión despertada en las audiencias por grabar el espacio en plena cuarentena (casi mil denuncias ante el CNTV), la crisis de rating que lo dejó marcando 9 puntos promedio hogar, muy lejos del punto de equilibrio, y la pérdida de su único avisador, Claro”.

Con estos antecedentes, la pregunta asoma sola: ¿Cómo va a conseguir David Belmar, el flamante socio de Agustín Lozano, los millones de dólares que necesitan los 18 clubes del fútbol profesional peruano? ¿Cómo garantiza la obtención de recursos millonarios si Belmar no tuvo capacidad para mantener un programa televisivo que era un show de baile?

Quizá por eso, 1190 Sports —su actual emprendimiento— no puede dar respuestas concretas a las preguntas centrales que le hacen los principales clubes peruanos: cuánto y de dónde va a obtener el dinero. Las respuestas son evasivas. Nada concreto en un tema tan delicado como la economía de los esforzados y débiles clubes peruanos.

David Belmar Torres, el personaje que ofrece fórmulas sin propuestas económicas concretas.

Finalmente, la insistencia de David Belmar para que las transmisiones de los partidos del torneo profesional peruano se hagan vía streaming y apenas un partido vaya por señal abierta, tiene una explicación. Tras el fracaso en Canal 13 con su productora Lateral y Bailando por un sueño, Belmar se alejó del masivo mundo de la televisión abierta y se refugió en una plataforma de streaming gratuita llamada Yooytv, en sociedad con el conductor televisivo sureño, Martín Cárcamo. Según el portal chileno Señal News: “El proyecto busca ganarse un espacio en el segmento con programas ligados al entretenimiento”. 

En el Perú, David Belmar Torres, su empresa 1190 Sports y Agustín Lozano quieren ensayar otro baile y en ese afán no les interesa poner en riesgo de quiebra a los clubes peruanos.

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Las tres fórmulas de Agustín Lozano y 1190 Sports en su afán de apropiarse de los derechos de televisión

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