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Desde Buenos Aires, una charla con Luis Advíncula

En exclusiva, habló con ONCE, uno de los jugadores más queridos de la selección peruana y que hoy es figura en el gran club argentino Boca Juniors. Una charla desde Buenos Aires y un Advíncula tocando todos los temas.

Daniel Yaipén
Lima. - 16 octubre 2022

“Tengo hijos y no quiero que se queden con la imagen de su papá derrotado con la camiseta de la selección, por eso volví, porque quiero mi revancha. Estoy convencido que podemos volver a clasificar al siguiente Mundial y hacer grandes campañas en la Copa América”, las palabras de Luis Advíncula se escuchan con la misma convicción y firmeza de cuando trepa por la banda derecha en busca del desborde letal al punto penal. Hoy viste la legendaria # 4 boquense y en la siguiente entrevista con ONCE nos cuenta mas detalles sobre su presente y objetivos futuros.

La ilusión de Lucho con la selección sigue intacta.

Creo que todos coincidimos en que estás en un gran momento en tu club. ¿Crees que has tenido un nivel más alto en otro momento?

No sé si exactamente el mejor, porque el fútbol es de momentos y seguro que antes he tenido buenos ciclos en mi trayectoria. De lo que sí estoy seguro, es que me encuentro en un gran etapa de mi carrera y de mi vida personal en general.

¿A qué se debe eso? ¿Qué tienes ahora que no tenías antes?

Los años no pasan en vano cuando uno escucha e intenta aprender de la gente buena que nos rodea, creo que se llama madurez. Ya no soy más un chibolo, ya cumplí 32 años. Creo que ahora tomo mejores decisiones en todos los aspectos de mi vida, tanto dentro como fuera de la cancha.

¿Al futbolista peruano en general le toma más tiempo madurar?

Creo que no se puede generalizar, pero lo que sí es verdad es que en Perú estamos acostumbrados a llamar chibolos o jóvenes promesas a jugadores de 21, 22 o 23 años. Cuando entras a la cancha eres un miembro más del equipo y tienes que asumir tu responsabilidad al igual que todos tus compañeros. Cuando la prensa, la afición o sus compañeros los llama “promesas” los confunde, se confían y piensan que aún les sobra el tiempo y no asumen las cosas con la seriedad que deberían. La carrera del futbolista pasa muy rápido en un abrir y cerrar de ojos ya estás sobre los 30, hay que aprovecharla al máximo desde un inicio.

¿Descríbeme cómo se siente ingresar a esa Bombonera repleta para un clásico?

Antes del partido es una mezcla de emoción, adrenalina, ansiedad y nervios pero una vez que entras a la cancha y el árbitro da el pitazo inicial todo queda atrás y sólo quieres dar todo para ganar y festejar con esa maravillosa hinchada. Jugar un clásico en la Bombonera y ganarlo es el sueño que cualquier jugador del mundo sueña desde niño. Yo creo que junto con el Barza vs Madrid son los clásicos mas populares del mundo, en todos los continentes hay personas que esperan para verlos.

No fue sencillo porque yo estaba asentado y cómodo en España, mis hijos estaban acostumbrados, tanto así que siguen viviendo allá. Pero cuando apareció la oportunidad lo vi como un nuevo reto, una hermosa oportunidad para jugar en un club grande a nivel mundial y saber de que estaba hecho. Si yo vine a Argentina fue por la gloria, para ganar títulos y entrar en la historia de Boca Juniors.

Advincula y su dulce presente con la camiseta xeneise.

Los primeros meses en Argentina no fueron fáciles ¿En algún momento te cuestionaste la decisión tomada?

Yo soy de las personas que nunca se arrepienten de las decisiones que toma, considero que sean buenas o malas siempre te dejan enseñanzas. Al principio fue muy complicado porque tenía que adaptarme a una nueva liga y sin pretemporada, pero nunca dudé porque no soy de los que se rinden fácilmente. Yo estoy acostumbrado a luchar desde muy joven, eso no es extraño para mí, todo lo que he avanzado en el fútbol fue a punta de mucho esfuerzo y tengo claro lo exigente que es ser jugador de un club tan grande como Boca Juniors.

Cuando recibió la oferta de Boca, había ascendido a la Liga 1 española con la camiseta del Rayo Vallecano.

Además de Carlos Zambrano ¿con quién más tuviste química desde el inicio en el club?

En realidad con casi todos, además de Carlos desde el inicio conté con la buena onda de Fabra, Villa, Rojo, Izquierdoz y Cardona que en esa época aún estaba en el plantel. Yo nunca he sido un jugador problemático me llevo bien con todos mis compañeros.

Están punteros en la Liga y sus números han mejorado notoriamente, sin embargo mucha prensa argentina sigue cuestionando su rendimiento colectivo.¿Cómo asumen esta actitud dentro del vestuario?

No leo, veo ni escucho prensa hace varios años atrás y creo que es lo más sano para mi salud mental. Yo tengo claro que la prensa siempre va a hablar de Boca porque es un club muy grande. Algo escucho de las noticias que comentan mis compañeros pero como te repito yo prefiero no ver programas de fútbol y dedicar mi tiempo libre en salir a comer o pasear.

Advincula alcanzo su madurez con la azul y oro.

Hablemos un poco de la selección. ¿En estos dos últimos amistosos que cambios tácticos fueron los más relevantes para el grupo?

Juan es un técnico muy metódico yo lo conozco hace muchos años, se fija en los detalles más mínimos que te puedas imaginar.

¿Cómo cuáles?

Por ejemplo, con qué pierna recibes los pases, si das los pases con la parte interior o exterior y la intensidad. Es un técnico que apunta a que sus equipos sean sumamente intensos y estoy seguro que, poco a poco, vamos a plasmar la idea de Juan en la cancha.

En una entrevista el profe Reynoso dijo que una vez más afiatados le gustaría jugar con tres al fondo para que tú y Marco López sean dos aviones yendo y viniendo por las bandas ¿Habló contigo algo al respecto?

Aún no hemos tenido la oportunidad de conversar largo, por ahora seguimos con un esquema similar al de los últimos años. Juan todavía no ha tenido mucho tiempo de trabajo con el grupo completo.

Advíncula confía en que Reynoso plasme su estilo en la selección.

Aún no se define si las clasificatorias comienzan en marzo o en junio ¿Cuándo preferirías tú?

Lo mejor para nosotros sería junio, así el comando técnico conocerá mejor al plantel y los jugadores que les toque estar tendrán más tiempo para entender e interiorizar la forma de juego que pretende Juan.

¿Cuál de los chicos que se incorporaron por primera vez te impresionó más por su juego?

Sorprendido no, porque tanto a Bryan Reyna como a Piero Quispe, ya los había visto en los partidos de la liga peruana y conocía de sus cualidades. Si bien Quispe no tuvo la oportunidad de alternar, estoy seguro que ya le llegará su momento y ambos le van a aportar muchas alegrías a la selección. Al grupo de la selectiva no pude observarlos porque nosotros (con Zambrano) volamos de Argentina a Estados Unidos.

En la Copa América de Brasil convertiste el penal mas festejado por la hinchada y en el repechaje te tocó fallar, el fútbol te puso en situaciones extremas. ¿Cómo se hace para manejar eso?

Créeme que es muy complicado, siempre se acuerdan más del error que de las cosas buenas que pudiste hacer antes, en un momento pensé en renunciar, porque me sentía muy mal fue durísimo. Me costo mucho pero decidí regresar ¿sabes por qué?

Cuéntanos

Tengo hijos y no quiero que se queden con la imagen de su papá derrotado con la camiseta de la selección, por eso volví porque quiero mi revancha. Estoy convencido que podemos volver a clasificar al siguiente mundial y hacer grandes campañas en la Copa América y voy a trabajar muy duro para ser protagonista de esas historias.

¿Qué o quiénes te ayudaron a superar ese momento?

Me arropó mi familia, mis amigos de toda la vida, mis compañeros de selección y del club, gracias a Dios tuve mucha gente querida que estuvieron pendientes de mi en esos momentos jodidos. Hay personas que creen que uno falla y después continua su vida normal y no pueden estar mas equivocados, si ellos sufrieron yo lo sufrí cinco veces más duro. Yo sé que si convertía ese penal la situación hubiese sido distinta y esa idea dándote vueltas en la cabeza por meses, es algo que pocos pueden entender cómo se siente. Saber que has causado una tristeza grande a todo tu país hace que te sientas muy mal, peor aún cuando sabes que trabajaste duro para darles todo lo contrario. Sientes como una mancha que no se borra en tu trayectoria, la presencia de mis hijos acompañándome esos días fue fundamental para levantarme y superarlo.

El apoyo de sus hijos fue fundamental para superar el momento más duro de su carrera.

Tienes más de 100 partidos con la selección, 2 medallas de bronce, un subcampeonato de Copa América y una clasificación al Mundial. ¿Cuál fue tu mejor partido?

Me gustaron mucho dos partidos en particular, en primer lugar el que jugamos contra Nueva Zelanda en Lima (partido que nos llevó a Rusia 2018), ese día metí un zurdazo que se estrelló en el travesaño. Y en segundo lugar, el amistoso de visita contra Alemania que le convertí un gol a Neuer y le metí un enganche bravo en mediocampo a Kimmich (risas), fuera de bromas me quedé muy contento con mi rendimiento en ambos partidos.

Advíncula festejando su tanto en Alemania.

¿Y uno que te emocionó mucho sin que tú estés en la cancha?

El partido en Quito, el día que anotó el “Caballito” Hurtado el segundo, yo estuve en banca ese día y no sabes se sufre más cuando no estás dentro del campo. Ese día sentí que habíamos dado el paso clave que nos iba a llevar al mundial.

Sé que los objetivos son grupales pero en lo personal ¿qué quieres lograr con la camiseta de la selección?

Definitivamente, el más grande y principal objetivo, mío y de todos, es regresar a un Mundial.

Ahora vayamos un poco a tus inicios ¿Cómo y donde fueron los primeros pasos de Luis Advincula?

Mis primeros pasos fueron cuando el primo hermano de mi papá me llevó a las divisiones menores de Alianza Atlético de Sullana, recuerdo que entrenábamos en el campo de Fertisa. De ahí, cuando tenía 14 años más o menos, me jalaron para el Esther Grande de Bentín y estando ahí fue que me convocan a la selección sub 20 que dirigía Tito Chumpitaz.

¿Debutaste en el 2009 con el Juan Aurich, cómo así llegaste al club norteño?

Mi paso por la selección me sirvió para que me vea Franco Navarro que era el técnico del Aurich en esa época. Él habló conmigo y mi representante que necesitaba un extremo joven para que alterne en su equipo y yo más que feliz me fui a Chiclayo, era la oportunidad que estaba esperando para jugar en primera.

¿Quién confió en ti para llevarte a Sporting Cristal?

El Dr. Ramón Aparicio habló con el “Chino” Rivera y no se qué me habrá visto (risas) pero él fue quién apostó para que me contraten. Llegué al club con 19 años y recuerdo que el Chino me dijo que confiaba mucho en mí, que esté tranquilo porque con trabajo duro, esfuerzo y disciplina me iba a ir bien en el club. El profe no se equivocó.

Recién llegado a Cristal con el Chino Rivera y Yotún.

¿Qué fue lo más importante que aprendiste en La Florida?

Sin lugar a dudas los valores que te inculcan, Sporting Cristal es una institución donde te enseñan que lo básico y primero es ser buena persona antes que buen jugador.

Tu papá fue futbolista ¿Qué consejo de todos los que debe haberte dado es el que te sirvió mas?

Que debo siempre tener la cabeza fría para tomar decisiones en los momentos difíciles, que el fútbol es una carrera hermosa pero llena de adversidades en el camino y es importante saber manejarse para analizar y superar esos momentos de la mejor manera.

Padre e hijos del lateral peruano disfrutando sus triunfos en Argentina.

¿Mejor plantel que integraste?

A nivel de selección el grupo con el que llegamos a Rusia 2018 y tuvimos una racha de 15 partidos invictos. A nivel de clubes, el Cristal del 2012 con el profe Mosquera en la dirección técnica, con ese equipo salíamos a la cancha sabiendo que íbamos a ganar, teníamos de todo y en todos los puestos, mucha calidad…que equipazo!

Sporting Cristal 2012.

¿El compañero más completo que has tenido durante toda tu carrera?

Ojo no lo digo porque sea mi compadre, pero Yoshimar Yotun es el jugador más completo con el que he compartido vestuario.

Con su compadre Yotun, compañeros desde juveniles hasta la selección.

¿El equipo y país más extraño donde jugaste?

He jugado en nueve países alrededor del mundo pero definitivamente el sitio más extraño y difícil para mi fue Ucrania. El idioma fue muy complicado y del frío mejor ni te cuento, terrible!

Descríbeme en una palabra cada equipo:
Sporting Cristal: Mi casa
Lobos Buap: Bienvenido en México
Newell´ s Old Boys: Cariño y respeto eterno
Bursapor: Bonita experiencia
Hoffenheim: Primera experiencia
Rayo Vallecano: Sueño cumplido (jugar en la primera de España)
Boca Juniors: El club más grande

Si bien todavía te faltan varios años de carrera, si dependiera sólo de ti ¿En que equipo te gustaría retirarte?

Falta mucho aún para eso porque yo pienso “robar” hasta que me dé el cuerpo (risas) así que aún no me lo he puesto a pensar. Ahorita te puedo decir me gustaría que sea en Sporting Cristal pero el destino no lo podemos controlar y prefiero ser cauto y esperar, yo tengo fe y me quedo tranquilo porque será en el equipo que Dios decida.

Para el lateral de la selección Sporting Cristal es su casa.

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