Jhoel Herrera, un ejemplo en el fútbol peruano

Se acaba de retirar a los 40 años. En su carrera supo enfrentar al racismo y, además de su calidad futbolística, destacó por su interés en adquirir cultura. Aquí una entrevista imperdible.

Daniel Yaipén
Lima. - 28 febrero 2021

Jhoel Herrera es un Quijote que luchó siempre contra la corriente esmerándose por mostrar una mejor imagen de los futbolistas. Su constante esfuerzo por cultivarse como persona, es el mejor legado que le puede dejar a su familia y a los jóvenes jugadores que quieran entender que un futbolista puede ser más que una figurita en Instagram. La semana pasada anunció su retiro a los 40 años y desde su cargo de jefe de equipo en Cusco FC promete trabajar duro para inculcar esos valores en la próximas generaciones del fútbol peruano.

Aquí la entrevista con uno de los jugadores que marcó la diferencia en el fútbol peruano.

¿Qué motivó en ti el deseo de cultivarte intelectualmente en paralelo a tu carrera de futbolista?

Tuve un episodio que me marcó y eso hizo reparar que la educación que había recibido en mi niñez era deficiente. Cuando llegué fichado por Sporting Cristal, se me acercó un periodista a entrevistarme y me preguntó si mi llegada al club había sido vertiginosa. Yo le dije que sí pero no tenía la más mínima idea del significado de esa palabra. Ese día fue el punto de quiebre que me hizo decidir culturizarme, ir más allá, y no sólo jugar bien al fútbol. Desde ahí me volví un autodidacta.

¿Qué tipo de literatura disfrutas más leer?

Me gusta la obra que nos dejó el escritor argentino Ernesto Sábato, el último que leí de él se llama El Túnel, me gusta su estilo medio complicado porque aprendo más (risas). Aunque no creas otro libro que también leo es el diccionario porque las palabras te llevan a una y otra cosa y no paras de aprender y enriquecer tu vocabulario.

¿Consideras que aún hay estereotipos muy marcados en nuestra sociedad sobre los futbolistas?

Por supuesto que sí, justo hoy tuve un roce en Twitter. Vi que Luz Salgado se puso a criticar al actual gobierno y yo le escribí preguntándole qué cosa había hecho ella por nuestro país en seis periodos congresales. Al toque saltaron dos ex congresistas que me intentaron minimizar diciéndome que yo era sólo un futbolista, que me dedique a aprender a patear al arco y no a hablar de política. Menosprecian nuestra profesión como si fuéramos ciudadanos sin derecho a opinar sobre el futuro de nuestro país. Hay muchos futbolista profesionales y honestos, mucho mejores personas que los políticos que solo se aprovechan de la falta de cultura de la mayoría del pueblo. Es responsabilidad de los ciudadanos ilustrarse para que la clase política deje de aprovecharse de la ignorancia.

¿Cuál fue la situación más complicada que te tocó vivir dentro de una cancha de fútbol?

Definitivamente el racismo. Ha sido algo muy recurrente y doloroso en mi carrera, sobre todo porque se dio mayormente en mi propio país. Lo que rescato es que ahora siento que cuando pasan estos actos hay muchas personas que se compran el pleito. Eso no pasaba antes, así que considero que estamos en un camino de mejora.

La Defensoría del Pueblo se solidarizó con la causa de Herrera.

¿Cuál fue el mayor sacrificio que hiciste para llegar a ser un jugador profesional?

Renunciar a un trabajo que tenía en una empresa de carnes donde me estaban pagando los estudios de Ingeniero en refrigeración industrial, incluso tenía un compromiso de quedarme trabajando con ellos por la inversión que estaban haciendo en mí. Ahí trabajaba mi padre y es él quién me lleva. El dueño, que tenía una amistad con mi papá, vio mis ganas de estudiar y salir adelante por eso me propuso ese trato con la condición que después se lo retribuiría trabajando en la empresa.

¿Tu papá qué te dijo al momento de decidir por el fútbol?

Mira, cuando la gente del Hijos de Yurimaguas me contactó para jugar en la segunda para mí fue una tremenda disyuntiva. El fútbol, en ese momento, era solo una afición y mi trabajo serio estaba en la empresa con mi papá. Lo primero que hice fue hablar con él porque no había forma que lo deje mal a mi viejo. Le dije: “Si tú me dices que me quede en la empresa, lo hago”. Me respondió: “Si jugar al fútbol es tu sueño, ve y persíguelo con todas tus fuerzas”. La disyuntiva se solucionó y a partir de ese día fui un león en cada pelota que dispute porque me acordaba del pedido que me hizo mi viejo.

Jhoel es una persona con valores y para él la familia es lo primero.

¿El dueño de la empresa de carnes cómo lo tomó?

Se molestó mucho, incluso cuando fui a hablar con él, se subió a su carro y me dejó hablando sólo. A los dos años firmé por Sporting Cristal y me enteré que él era hincha del equipo, así que me aparecí por la empresa con una camiseta firmada para él. Se puso muy contento y me regaló carne para llevar a mi casa (risas). Aunque ya no nos acompaña físicamente, es una de las personas que recuerdo con mucho cariño.

¿Cómo se interesó en ti el Hijos de Yurimaguas, quién te descubrió ?

El profe Ilder Chávez. Me conocía desde la Liga de Ventanilla y uno de los que habló con el presidente Iturrizaga fue Benjamín “Colibrí” Rodríguez. Teníamos un equipo simpático con “Mágico” Gonzales y mi compadre Manolo Caldas como figuras.

¿Qué es lo mejor que le dio Jhoel Herrera al fútbol?

Creo que lo mejor que le aporte al fútbol fue ayudar a cambiar la imagen tradicional que tiene el futbolista peruano. Me esforcé mucho para que, más allá de ser bueno o malo, resaltara en mí la disciplina y las ganas de dar un buen ejemplo para los chicos que vienen detrás. Si bien no soy un santo, se debe entender que un futbolista profesional tiene que comportarse como tal. También es muy importante crecer desde la parte humana en paralelo con las condiciones para el juego.

¿Qué es lo mejor que te dio el fútbol?

Confianza y autoestima. Antes del fútbol yo era muy introvertido. Mis compañeros y algunos técnicos me ayudaron con eso. Me hicieron entender que nadie puede humillarte por el color de tu piel o tu condición socioeconómica.

¿De qué compañeros estamos hablando?

Fueron varios, los que se me vienen ahorita a la mente son Jorge Espejo, Jhonny Vegas, ‘Cuto’ Guadalupe, mi compadre Retamozo, Ryan Salazar, ‘Chemo’ Ruiz, mi hermano Marcio Valverde, entre otros. El fútbol me ha regalado la amistad de muchas personas extraordinarias y estoy muy agradecido por eso.

¿Cuál fue la mayor satisfacción de tu carrera?

Haber llegado a una institución como el Real Garcilaso del Cusco donde más allá de las extraordinarias campañas que hicimos, incluso llegando a cuartos de final de la Copa Libertadores, encontré mi lugar en el fútbol porque somos una familia donde me consideran y respetan como ser humano.

¿Pensé que me ibas a decir tu paso por la selección?

Esa fue la cereza del pastel, un anhelo que añoraba desde chico y se me vino a dar ya grande gracias al profe Markarián. Sergio me dio mucha confianza para disputar los partidos de clasificatorias y puedo sentirme orgulloso de la manera en que defendí la sagrada rojiblanca.

En la selección nacional compartió equipo con figuras como Pizarro y Farfán.

¿Qué se quedó en el tintero?

Viendo en retrospectiva creo que en el 2007 debí aceptar la propuesta del Sao Paulo de Brasil en lugar de irme a Polonia. Creo que si hubiera hecho escala primero en Brasil hubiera podido llegar a una liga europea más competitiva.

¿Por qué rechazaste el fútbol de los pentacampeones del mundo?

El empresario que tenía en esos momentos me aconsejó ir de frente a Europa. Me imagino que en esta transacción le quedaba un dinero más interesante para él (risas).

Con Alianza enfrentó a Sao Paulo en la Libertadores.

¿Qué recuerdos de Polonia?

En líneas generales, bien. Los compañeros me dieron un buen recibimiento y comencé jugando con regularidad; luego regresó el “hijo pródigo” del club que había sido vendido a no sé qué liga, pero no se acostumbró y para mi mala suerte era lateral derecho y ya se me complicó la cosa (risas). Pero todo bien, tanto así que después de regresar a Alianza Lima en el 2008, al año siguiente el Belchatow me vuelve a llevar a Polonia. Por esa época estaban allá Hernán Rengifo, el `Pato’ Quinteros y la ‘Comba’ Cueto en el Lech Poznan. Yo fui con ‘Wally’ Sánchez al Belchatow. Los peruanos estábamos bien visto por el buen nivel futbolístico que mostramos.

¿Qué partido es el que recuerdas con mayor alegría?

En la fase de grupos de la Libertadores del 2013, en Asunción ante Cerro Porteño con el Real Garcilazo. Lo ganamos sobre la hora después de haber hecho un partidazo. Ese día no dimos cuenta de que éramos una familia y que si nos los proponíamos estábamos para alcanzar cosas grandes.

Herrera ante Cerro Porteño, el día que los derrotaron de visita por la Libertadores.

¿Un compañero que te impresionó por su calidad futbolística?

Joazinho Arroe, un jugador con una talento increíble. Si pudiera sostener los destellos de calidad que muestra, no se dónde estaría jugando.

¿Mejor entrenador que tuviste?

Mariano Soso, a pesar que lo tuve en los últimos años de mi carrera. Me sentí muy cómodo con él y Duilio Cisneros. Sin importar la edad aprendí más cosas y pude reflejarlas en mi rendimiento dentro del terreno de juego.

¿Qué viene ahora para Jhoel Herrera?

Bueno, yo me gradué en Administración Deportiva en la FPF y también como Director Técnico en la Asociación de Técnicos Argentinos. Voy a asumir a partir de este año el gran reto de ser el jefe de equipo de Cusco FC y mi objetivo es recobrar la esencia y mística que teníamos nosotros. También brindarles todas las comodidades logísticas que merece un plantel profesional. Otro proyecto importante que tengo es el trabajo en divisiones menores. Vamos a trabajar en conjunto el fútbol, la psicología y el nivel educativo, de la mano de profesionales en cada rubro para que los chicos sepan que no es sólo cuestión de pegarle bien a una pelota. Nuestro objetivo es que los chicos crean en sus condiciones desde pequeños y lleguen a la primera como jugadores integrales, que no tengan miedo escénico ni se regresen rápido cuando vayan al extranjero porque extrañan sus costumbres.

Jhoel encontró en Garcilaso FC (hoy Cusco FC) su familia en el fútbol.

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