Los derechos de televisión son el principal ingreso que tienen los clubes profesionales peruanos. Sin los ingresos provenientes del derecho de televisación, el fútbol peruano se va a la quiebra.
Al presidente de la FPF, Agustín Lozano, se le ha ocurrido que los contratos de televisión tienen que pasar por su escritorio. Este personaje continúa con su tendencia a lo ilícito —tiene denuncias por lavado de activos y reventa de entradas— y en el mes de setiembre la Fiscal de la Nación lo ha denunciado por enriquecimiento ilícito.
Lozano, desde su cargo de presidente de la FPF, ha creado un esquema delictivo para apropiarse del único ingreso que sostiene a los clubes de la primera división peruana: los derechos de televisión para transmitir los partidos del torneo profesional.
El caso concreto de los derechos de televisión
Cada club peruano tiene derecho a negociar los derechos de televisión, no necesita que la FPF, de manera unilateral, se convierta en el gran y único representante y el que reparte la torta. Nunca ha sido ese el rol de la FPF en toda la historia y ahora Lozano pretende tener esa atribución.
Para lograr esa finalidad, Lozano ha contratado a una empresa chilena llamada 1190 Sports, y aquí surge este razonamiento de simple lógica:
¿A quién le interesan los partidos del fútbol peruano? ¿A Europa? ¿A Latinoamérica? ¿A Sudamérica? A nadie. Solamente le interesa a los peruanos porque no es un torneo con capacidad de ser vendido al exterior.
¿Quiénes son los únicos que podrían comprar esos derechos? Los canales de televisión peruanos, sea de señal abierta o de cable, como se ha venido haciendo desde hace más de una década.
Entonces, lo más sencillo y transparente sería que la FPF llame a una licitación o a un concurso a los canales peruanos de señal abierta y de cable, como ha sido desde hace más de una década.
¿Por qué quiere cambiar todo Lozano? ¿Para qué trae Lozano a una empresa del exterior? Por una razón de corrupción. Quiere que la empresa chilena 1190 Sports administre el fútbol peruano y cobre el 30% del total de los derechos de televisión. Tamaño porcentaje es un costo innecesario. ¿Quiénes se van a beneficiar?

Hasta el momento, Agustín Lozano en contubernio con 1190 Sports han cometido varios actos ilegales y uno de los más saltantes es una extraña licitación.
En efecto, en agosto de este año, la FPF convocó a una licitación sobre los derechos televisivos de la Liga 1 peruana. Lo extraño es que los postores tenían que presentar sus propuestas no en Lima sino en una notaría de Santiago de Chile.

Es un acto ilegal. No se puede llevar a un país extranjero una licitación sobre derechos de televisión del fútbol peruano. La licitación fue un fracaso y tuvo que ser declarada desierta. Solo se presentó la empresa 1190 Sports. En la ciudad de Lima existen 135 (ciento treinta y cinco notarías) pero Agustín Lozano eligió Chile. ¿Por qué?
Luego vino la siguiente irregularidad. Al momento de informar que se declaraba desierta la licitación, la FPF señaló en un comunicado del 11 de agosto de 2022 algo ilegal: “Nos es grato informar que hemos recibido una muy interesante oferta de 1190 Sports, empresa global, basada en Miami, dedicada a la gestión y comercialización de derechos deportivos”.
Se trata de un anuncio ilegal. La FPF está obligada a proteger los derechos de los clubes profesionales peruanos, por lo tanto no puede elogiar o privilegiar a ningún concursante y mucho menos al único que se presentó en una licitación declarada desierta. Este anuncio es una muestra de que Lozano y 1190 Sports tienen un pacto ilícito. En derecho penal se llama Delito de Corrupción al Interior de entes privados que sanciona el art. 241, B del Código Penal.
Ahora la FPF está planteando a los clubes peruanos otro mecanismo también ilegal: pretende que 1190 Sports, empresa extranjera que opera en Chile, se convierta en la administradora del fútbol profesional peruano.

Una propuesta inválida por varias razones
La FPF no puede imponerle a los clubes peruanos que una empresa extranjera como 1190 Sports se convierta en la administradora del torneo peruano. Agustín Lozano, como presidente de la FPF, carece por completo de facultades para ello.
A pesar de que los clubes solicitan precisiones por tratarse de un tema económico que les afecta, 1190 Sports no explica cómo conseguirá los millones de dólares que hoy reciben los clubes peruanos y no existe ninguna razón que justifique la necesidad de un intermediario, salvo que exista una razón de corrupción.
En la sombra está actuando también la empresa Mediapro que junto a 1190 Sports son dos empresas muy cuestionadas y ligadas a corrupción.
Mediapro, a través de su funcionario Alfredo Arosemena, se está encargando de acercarse a algunos clubes para que se reúnan con 1190 Sports y con la FPF. Es una tarea de lobby que tiene una finalidad: Mediapro quiere que 1190 Sports se encargue de manejar la liga peruana para que luego contrate a Mediapro que es una empresa que se encarga de producir la transmisión de partidos con cámaras, unidades móviles y VAR. De ese modo, 1190 Sports y Mediapro se harían dueños del fútbol peruano. Lo que significa que chilenos queden al mando del fútbol nacional.
Los actores de estos actos ilegales son los siguientes:
– Agustín Lozano, presidente de la FPF
– Jean Marcel Robilliard, secretario general de la FPF
– David Belmar Torres, presidente de 1190 Sports
– Alfredo Arosemena, Country Manager de Mediapro en Perú y Chile
Estas acciones las vienen desarrollando de manera concertada desde el año 2021 y han ingresado al oscuro escenario de las responsabilidades penales que habrá de mostrar más de una sorpresa.