El hábil juego del volante Raziel García se puede entender en que la perfección no consiste en la multitud de cosas hechas, sino en el hecho de estar bien hechas. Si un jugador de fútbol ayuda a marcar, tiene lectura de juego y si además pasa bien la pelota, hará la diferencia. Con 1.75 cm, el volante de César Vallejo lució su juego en las canchas hasta llegar a ser convocado a la selección por Ricardo Gareca.
Su primera experiencia con la redonda fue en su barrio, entre el polvo y las patadas en Chorrillos, con solo 11 años comenzó a destacar y gracias la solicitud de un amigo llegó a probarse al club San Martín. A los 16 años tuvo una oferta del Brujas de Bélgica, pero decidió no ir.
Aquí la entrevista con Raziel García (26 años). Uno de los pocos futbolistas a los que la pelota mira con cariño.
Tu estilo de juego es el del futbolista moderno
Siempre he tenido la virtud de ser bien creativo en el tema de los pases. Pero creo que la experiencia de los partidos jugados te ayuda a decidir aún mejor al momento que estás en la cancha.
¿Hoy destaca quien recupera y pasa bien la pelota?
Más que un gran desempeño marcando, mi característica es la buena lectura que tengo para las jugadas. Eso es algo que aprendí en la selección sub 17. Antes de recibir la pelota, pensar la jugada que voy a hacer. Todo se mueve también de acuerdo a los jugadores que tienes al lado.

Entonces, ¿has evolucionado como futbolista?
Ahora tengo más libertad, es algo que me da ‘Chemo’ en César Vallejo. Antes, en la sub 17 llegó Daniel Ahmed y me enseñó a jugar como mediocampista mixto. Él alineaba tres jugadores en el centro del campo. La única diferencia con ese juego al de hoy, es que en la actualidad juego más arriba.
Empezaste en el fútbol en la San Martín ¿cuál fue tu primera posición en un esquema táctico?
En ese momento había otra formación en San Martín, distinta a lo que juega hoy. Usábamos un 4-4-2. Yo era volante por fuera en el costado derecho.
¿Cómo se dio tu llegada al equipo de Santa Anita?
Fue algo inesperado. Yo soy de Chorrillos y jugaba los clásicos de barrio, de cuadra en mi zona. Teniendo once años, un día un amigo de la iglesia, que trabajaba como mensajero en la universidad me llevó a probarme. Pese a que no había categoría sub 11, me quedé y me hicieron jugar con chicos de 13 años. Lo hice sin problema, a pesar que dos años a esa edad es bastante.

Aquellos tiempos cuando San Martín armaba equipos fuertes.
Tenían un súper equipo, cuando debuté en la profesional (en 2012 a los 18 años) el que me cortó el pelo fue Johnnier Montaño. Recuerdo que por el equipo pasaron Leao Butrón, el ‘chino’ Huamán, ‘chicho’ Salas. Yo crecí viendo a esos jugadores importantes.
Además, a nivel logístico San Martín se maneja de manera impecable.
Todo es muy tranquilo, te cumplen. No sé cómo estará en la actualidad, pero sé que hoy el presupuesto es más limitado, apuestan por los chicos y quizá todo ha incidido un poco en los resultados.
¿Te entrenó Julio César Uribe? Dicen que los partidos de práctica parece futbolista activo.
Totalmente de acuerdo. A la edad que tiene es increíble. De él aprendí la picardía. Bajo su dirección jugamos la final del Torneo del Inca 2015 ante Alianza Lima. Ganábamos 2-0, pero lo del juez Víctor Hugo Carrillo fue escandaloso. Expulsó a Luis Perea en el primer tiempo, cuando estábamos jugando tranquilamente. Al final perdimos.
¿Hubo un momento duro en San Martín?
No la pasé bien con ‘Chemo’ del Solar como entrenador. Solo jugué un partido y de allí decidió no contar más conmigo. Pasó por mi cabeza no volver a jugar al fútbol y dedicarme a otra cosa.

Entonces, decidiste retroceder un paso y jugar segunda división con Unión Huaral…
Fue un año de relanzamiento para mí (fue escogido el mejor jugador del torneo) Éramos protagonistas, pero nos caímos en las últimas 5 fechas. Sin embargo, allí sentí todo el apoyo, tuve un buen desempeño y por eso César Vallejo me llevó para reforzarlos.
Era volver a estar lejos de la capital
Es un tema de esfuerzo, de adaptarse a provincia, en este caso Trujillo. Dejar la comodidad de Lima es algo que tomé como un reto. Yo soy tímido, me cuesta un poco intentar cosas nuevas, pero en ese caso fue una gran decisión y no me arrepiento.

Justamente con César Vallejo jugaste un partidazo en Lima este 2020 y le ganaron a la ‘U’.
Para mí ha sido el mejor partido que he tenido en lo que va del año. Allí me pegaron, pero me gusta que lo hagan, estoy acostumbrado.
¿Quiénes han sido los que peor te han tratado dentro de una cancha?
Uno de los que más duro me pateó ha sido Leandro Fleitas. Cuando estaba en Unión en Huaral y él en Vallejo me agarraba a patadas. Gracias a él vine aquí (risas). Otro que me dio duro fue el ‘chengue’ Morales, era ‘macheterazo’ en una ocasión me sacó del partido. El tercero en esa lista fue Yoshimar Yotún quien me lesionó tres meses. Fue una lesión complicada.
En el tema de los árbitros, como me contaste, uno de los más difíciles fue Carrillo ¿y otro?
Lo de Carrillo fue por esa final contra Alianza. El otro es Mike Palomino. La vez pasada me lo crucé y le dije: “me debes una”. Es que cuando estaba en Vallejo me expulsó a los 14 minutos de un partido ante mi ex club, Huaral. Bajé una pelota de un saque largo del portero, pero no me di cuenta que venía un rival y me sacó la roja.
Pasemos al rubro de los mejores socios para jugar.
He tenido varios: Christian Cueva en San Martín, Johnnier Montaño, Joel Sánchez. En Vallejo tengo a Víctor Cedrón, José Manzaneda, Jairo Vélez. Gente que le gusta tocar la pelota, también está Frank Ysique quien hace el trabajo silencioso.

¿Cosas para mejorar?
El gol. Ese es un tema que necesito pulir, porque a veces tengo ocasiones. Solamente debo creérmela más, tener la determinación para llegar al área y definir. Pese a eso tengo mi gol favorito, uno que le hice a Leao Butrón en 2014 cuando él estaba en Melgar.
Este 2020 te llegó la convocatoria a la selección.
Es algo lindo, algo que soñé desde muy pequeño. Ahora debo seguir enfocado, rindiendo lo mejor para mantenerme en el radar de las convocatorias y corregir mis debilidades.
De la formación de Perú ¿en cuál posición rendirías más?
Yo estoy acostumbrado a jugar de extremo o de mediapunta. Siempre listo si se da la posibilidad.